#UnPocoDeHistoria - La CCA | El día en que los cómics casi pierden por knock-out

El mundo de los cómics esta lleno de cosas curiosas que resultan por demás interesantes. Pero en algunas ocasiones, estas resultan en severas complicaciones.

Nos ubicamos a mediados de la década de los años 50. El Congreso de los Estados Unidos ha iniciado una investigación sobre la delincuencia juvenil en el país en la que una vertiente analizaba la influencia de los cómics en esta. Por otro lado, el siquiatra Fredric Wertham acababa de publicar su ensayo La Seducción de los Inocentes, en el que acusa de manera tajante a los cómics de corromper a los niños e inducirlos a la violencia.

El ensayo de Wertham tuvo un relativo éxito en la Unión Americana pero suficiente para alarmar a muchos padres y que estos iniciaran una campaña para que los cómics fueran censurados.

Este es el marco en el que nace la Comics Code Authority (CCA), la cual desde el momento de su fundación se encargó de regular de manera sumamente restrictiva la publicación de cómics en dicho país.

A partir de ese momento los jueces, los oficiales de policía, las organizaciones gubernamentales y cualquier otra autoridad no podía ser presentada en los cómics ya que esto fomentaba la falta de respeto a las leyes establecidas. Tampoco eran bien vistos temas como el secuestro, el uso de armas y drogas y se exigía que el argumento siempre mostrara de forma evidente que el bien triunfa sobre el mal en todas sus formas.

La palabras "terror", "horror" y "crimen" quedaron prohibidas a partir de ese momento. Y las historias de vampiros, zombies, hombres lobo, etc. tuvieron que salir del mercado. En relación a esto mismo, cabe acotar que el editor William Gaines acusó de que esta ley era incisiva con sus publicaciones cuyas más exitosas eran: "Crime SuspenStories", "The Vault of Horror" y "The Crypt of Terror". Su editorial, EC Comics inmediatamente comenzó a tener pérdidas hasta que llegó el momento que debió cerrar.

Antes de la CCA existía una regulación en la que los cómics sexuales eran revisados. Sin embargo, esta nueva ley fue más allá pues declaraba específicamente que las "perversiones sexuales", "anormalidades sexuales" y "relaciones sexuales ilícitas" no debían aparecer en las páginas de los comic books. Igualmente, la violación, el sadismo y la seducción quedaron prohibidas. Además, las historias románticas debían remarcar "la santidad del matrimonio" y cuidar que las escenas pasionales no fomentarán los "bajos instintos".

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Tabaco, alcohol, cuchillos, pirotecnia y objetos de baño de "cuestionable naturaleza" tampoco debían exhibirse. A pesar de todo, Fredric Wertham (mencionado al inicio) consideró esta regulación como una ineficiente medida (No sé que buscaba entonces).

Fue una época brutal para la industria del cómic ya que todas aquellas editoriales que se negaron a formar parte de la CCA no recibían el sello de aprobación en sus publicaciones y las distribuidoras se negaron a comercializar sus productos.

Muchas series fueron canceladas y editoriales enteras cerraron, Hasta Batman y Wonder Woman fueron dañados ya que se les acusaba de fomentar las fantasías homosexuales y el lesbianismo respectivamente.

En ese momento de angustia apareció un hombre, que al más puro estilo de los héroes que estaban siendo sojuzgados se rebeló y dio inicio a la modificación de esta ley y el resurgir de las historias.

Hablaremos de él la próxima semana cuando volvamos a analizar #UnPocoDeHistoria

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